manchas en la piel

¿Cómo cuidar tu piel de las manchas en verano?

El verano es la época en la que más manchas en la piel aparecen o al menos, se hacen más visibles. Esto se debe principalmente a la radiación ultravioleta (UV) del sol.

¿Por qué aparecen las manchas en verano?

Cuando la piel se expone al sol, se activa un mecanismo de defensa natural: la producción de melanina. La melanina es el pigmento que da color a nuestra piel y actúa como un filtro solar natural. Sin embargo, una exposición excesiva o prolongada al sol puede hacer que la melanina se distribuya de manera irregular, concentrándose en ciertas áreas y dando lugar a las manchas oscuras que conocemos como hiperpigmentación.

Además del sol, hay otros factores que pueden influir en la aparición o empeoramiento de las manchas:

  • Factores hormonales. El embarazo (melasma o «paño»), el uso de anticonceptivos o desequilibrios hormonales pueden hacer que la piel sea más sensible al sol y propensa a desarrollar manchas.
  • Genética. Algunas personas tienen una predisposición genética a desarrollar manchas.
  • Edad. Con el envejecimiento, la piel acumula daño solar y es más propensa a la aparición de léntigos solares («manchas de la edad»).
  • Inflamación. Algunas afecciones cutáneas inflamatorias (como el acné, quemaduras o irritaciones) pueden dejar una pigmentación postinflamatoria que se oscurece con la exposición al sol.
  • Ciertos medicamentos. Algunos fármacos pueden aumentar la fotosensibilidad de la piel.

Tipos de manchas más comunes en verano

  1. Léntigos solares. Son las «manchas de la edad» o «manchas solares». Suelen ser planas, de color marrón claro a oscuro, y aparecen en zonas crónicamente expuestas al sol como la cara, el escote, las manos y los brazos. Son una consecuencia directa del daño solar acumulado.
  2. Melasma (o cloasma). Son manchas más grandes y difusas, generalmente de color marrón claro a oscuro, que suelen aparecer en la frente, mejillas, labio superior y barbilla. Suelen tener un componente hormonal muy importante (embarazo, anticonceptivos) que se exacerba con el sol.
  3. Pecas (efélides). Son pequeñas manchas marrones que se oscurecen y se multiplican con la exposición al sol en personas de piel clara. A menudo desaparecen o se aclaran en invierno.
  4. Hiperpigmentación postinflamatoria (HPI). Manchas oscuras que quedan después de una lesión en la piel (acné, quemaduras, irritaciones, picaduras de insecto). Se vuelven más evidentes con la exposición solar.
  5. Queratosis seborreicas. Son lesiones benignas, a menudo elevadas, de color marrón a negro, que parecen «pegadas» a la piel. Aunque no están directamente relacionadas con el sol como los léntigos, pueden oscurecerse con la exposición.

Prevención de las manchas en verano

Consejos importantes:

  • Protección solar rigurosa:
    • Usa un protector solar de amplio espectro (UVA y UVB) con un SPF de 30 o superior todos los días, incluso en días nublados.
    • Reaplica cada 2 horas, o con mayor frecuencia si sudas mucho o te bañas.
    • Aplica una cantidad suficiente (aproximadamente una cucharadita para la cara y el cuello).
  • Evita las horas de máxima insolación. Intenta no exponerte directamente al sol entre las 10:00 y las 16:00 horas, cuando los rayos UV son más intensos.
  • Ropa protectora. Utiliza sombreros de ala ancha, gafas de sol y ropa con protección UV (o ropa de manga larga y pantalón largo de tejidos frescos).
  • Busca la sombra. Siempre que sea posible, permanece bajo una sombrilla, un árbol o cualquier otra fuente de sombra.

Tratamiento de las manchas en la piel

Si ya tienes manchas, existen tratamientos que pueden ayudar a aclararlas o eliminarlas. Es importante ser constante y, en muchos casos, buscar la orientación de un dermatólogo.

  • Productos despigmentantes tópicos. Cremas y sérums con ingredientes activos como:
    • Hidroquinona. Un potente despigmentante, solo bajo prescripción médica.
    • Retinoides (retinol, tretinoína). Ayudan a la renovación celular y a distribuir la melanina de forma más uniforme.
    • Ácido kójico, ácido azelaico, ácido tranexámico, niacinamida, arbutina, vitamina C. Menos irritantes, pero efectivos para inhibir la producción de melanina y aclarar las manchas.
  • Peelings químicos. Aplicación de soluciones químicas que exfolian las capas superficiales de la piel, eliminando el pigmento acumulado y estimulando la regeneración celular.
  • Láser y luz pulsada intensa (IPL). Tratamientos médicos que utilizan energía lumínica para fragmentar el pigmento de las manchas, que luego el cuerpo elimina. Son muy efectivos para léntigos solares.
  • Crioterapia. Congelación de la mancha con nitrógeno líquido, especialmente para léntigos.