La abdominoplastia es la cirugía mediante la cual se extirpa el exceso de grasa y piel del abdomen. La incisión se realiza por encima de la zona del pubis y se puede extender hacia la zona de la cadera. Dependiendo de cada caso, la incisión también se realiza en la zona del ombligo.
Qué se consigue con la abdominoplastia
Gracias a la abdominoplastia se consigue reducir el abdomen y que sus músculos estén más tensos. Es una cirugía que está indicada, principalmente, para aquellas personas que han perdido mucho peso que tienen flacidez y exceso de piel. También para mujeres cuyo abdomen se ha visto afectado a causa del embarazo.
Tipos de abdominoplastia
La elección de cada tipo de abdominoplastia depende de la cantidad de piel y grasa que haya que eliminar:
– Miniabdominoplastia: se utiliza en los casos más leves, es decir, aquellos cuyo exceso de grasa se sitúa debajo del ombligo. La incisión no es muy grande, parecida a la de una cesárea. El postoperatorio es mucho menos doloroso y dura menos tiempo.
– Abdominoplastia horizontal: aunque la finalidad es la misma, este tipo se aplica en casos intermedios. Por tal motivo, la cicatriz es más larga que la de la miniabdominoplastia pero menor que en la circunferencia. El tiempo de la cirugía y el postoperatorio es más complejo que en la miniabdominoplastia.
– Abdominoplastia circunferencial: está dirigida aquellas personas que han sufrido grandes pérdidas de peso, que ni con dieta ni ejercicio puede recuperar su forma. La incisión se realiza sobre toda la línea de la cintura. Al tratarse del tipo de abdominoplastia más compleja requiere de hospitalización y además la duración de la cirugía es mayor que en los casos anteriores. Entre las 3 y 5 horas. En la mayoría de los casos requiere de una reconstrucción del ombligo.
Postoperatorio
Como la mayoría de los postoperatorios requiere de paciencia y cuidados. Como hemos mencionado, dependiendo del tipo de abdominoplastia se necesita hospitalización durante unos días.
Durante los primeros días el paciente tiene dolor e incomodidad en toda la zona. Por ello, se recetan analgésicos para paliar el dolor.
Para el cuidado de la cicatriz y que esta no sufra infecciones es importante mantener una buena higiene y seguir las instrucciones del médico que variarán en función de la extensión y del tipo de incisión. Es importante tras el transcurso de unas semanas mantener la zona bien hidratada.
Otra de las pautas a tener en cuenta es que durante dos o tres semanas mínimo no se puede realizar ejercicio ni coger peso. Será necesario durante un mes aproximadamente llevar una faja especializada en cirugías para evitar que los músculos realicen esfuerzos. Tampoco se puede conducir durante los primeros días y a la hora de dormir debe estar boca arriba y si es posible, colocar una almohada debajo de las rodillas.
En cualquier caso, estas son pautas generales que pueden cambiar en cada caso particular. En caso de cirugía de abdominoplastia será el cirujano quien te paute las instrucciones a seguir.