El verano es la época en la que más manchas en la piel aparecen o al menos, se hacen más visibles. Esto se debe principalmente a la radiación ultravioleta (UV) del sol.
¿Por qué aparecen las manchas en verano?
Cuando la piel se expone al sol, se activa un mecanismo de defensa natural: la producción de melanina. La melanina es el pigmento que da color a nuestra piel y actúa como un filtro solar natural. Sin embargo, una exposición excesiva o prolongada al sol puede hacer que la melanina se distribuya de manera irregular, concentrándose en ciertas áreas y dando lugar a las manchas oscuras que conocemos como hiperpigmentación.
Además del sol, hay otros factores que pueden influir en la aparición o empeoramiento de las manchas:
- Factores hormonales. El embarazo (melasma o «paño»), el uso de anticonceptivos o desequilibrios hormonales pueden hacer que la piel sea más sensible al sol y propensa a desarrollar manchas.
- Genética. Algunas personas tienen una predisposición genética a desarrollar manchas.
- Edad. Con el envejecimiento, la piel acumula daño solar y es más propensa a la aparición de léntigos solares («manchas de la edad»).
- Inflamación. Algunas afecciones cutáneas inflamatorias (como el acné, quemaduras o irritaciones) pueden dejar una pigmentación postinflamatoria que se oscurece con la exposición al sol.
- Ciertos medicamentos. Algunos fármacos pueden aumentar la fotosensibilidad de la piel.
Tipos de manchas más comunes en verano
- Léntigos solares. Son las «manchas de la edad» o «manchas solares». Suelen ser planas, de color marrón claro a oscuro, y aparecen en zonas crónicamente expuestas al sol como la cara, el escote, las manos y los brazos. Son una consecuencia directa del daño solar acumulado.
- Melasma (o cloasma). Son manchas más grandes y difusas, generalmente de color marrón claro a oscuro, que suelen aparecer en la frente, mejillas, labio superior y barbilla. Suelen tener un componente hormonal muy importante (embarazo, anticonceptivos) que se exacerba con el sol.
- Pecas (efélides). Son pequeñas manchas marrones que se oscurecen y se multiplican con la exposición al sol en personas de piel clara. A menudo desaparecen o se aclaran en invierno.
- Hiperpigmentación postinflamatoria (HPI). Manchas oscuras que quedan después de una lesión en la piel (acné, quemaduras, irritaciones, picaduras de insecto). Se vuelven más evidentes con la exposición solar.
- Queratosis seborreicas. Son lesiones benignas, a menudo elevadas, de color marrón a negro, que parecen «pegadas» a la piel. Aunque no están directamente relacionadas con el sol como los léntigos, pueden oscurecerse con la exposición.
Prevención de las manchas en verano
Consejos importantes:
- Protección solar rigurosa:
- Usa un protector solar de amplio espectro (UVA y UVB) con un SPF de 30 o superior todos los días, incluso en días nublados.
- Reaplica cada 2 horas, o con mayor frecuencia si sudas mucho o te bañas.
- Aplica una cantidad suficiente (aproximadamente una cucharadita para la cara y el cuello).
- Evita las horas de máxima insolación. Intenta no exponerte directamente al sol entre las 10:00 y las 16:00 horas, cuando los rayos UV son más intensos.
- Ropa protectora. Utiliza sombreros de ala ancha, gafas de sol y ropa con protección UV (o ropa de manga larga y pantalón largo de tejidos frescos).
- Busca la sombra. Siempre que sea posible, permanece bajo una sombrilla, un árbol o cualquier otra fuente de sombra.
Tratamiento de las manchas en la piel
Si ya tienes manchas, existen tratamientos que pueden ayudar a aclararlas o eliminarlas. Es importante ser constante y, en muchos casos, buscar la orientación de un dermatólogo.
- Productos despigmentantes tópicos. Cremas y sérums con ingredientes activos como:
- Hidroquinona. Un potente despigmentante, solo bajo prescripción médica.
- Retinoides (retinol, tretinoína). Ayudan a la renovación celular y a distribuir la melanina de forma más uniforme.
- Ácido kójico, ácido azelaico, ácido tranexámico, niacinamida, arbutina, vitamina C. Menos irritantes, pero efectivos para inhibir la producción de melanina y aclarar las manchas.
- Peelings químicos. Aplicación de soluciones químicas que exfolian las capas superficiales de la piel, eliminando el pigmento acumulado y estimulando la regeneración celular.
- Láser y luz pulsada intensa (IPL). Tratamientos médicos que utilizan energía lumínica para fragmentar el pigmento de las manchas, que luego el cuerpo elimina. Son muy efectivos para léntigos solares.
- Crioterapia. Congelación de la mancha con nitrógeno líquido, especialmente para léntigos.