SIBO: Sobrecrecimiento Bacteriano en el Intestino Delgado. Causas y qué es

El sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado (SIBO) es una condición que ocurre cuando hay un aumento anormal en la cantidad de bacterias en el intestino delgado. Especialmente de tipos de bacterias que normalmente se encuentran en mayor número en el intestino grueso (colon).

En condiciones normales, el intestino delgado tiene una concentración relativamente baja de bacterias en comparación con el colon. El SIBO altera este equilibrio.

Síntomas comunes

Entre los más comunes se incluyen:

  • Distensión abdominal.
  • Gases y flatulencias.
  • Diarrea o estreñimiento (o ambos alternados).
  • Dolor o malestar abdominal.
  • Fatiga.
  • Malabsorción de nutrientes.

Causas SIBO

La causa del sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado (SIBO) es multifactorial. A menudo involucra una combinación de factores que alteran el equilibrio normal de las bacterias en el intestino delgado. Aquí están las causas y factores de riesgo más comunes:

1. Motilidad intestinal alterada

  • Disminución de la motilidad. El intestino delgado tiene un movimiento natural llamado complejo motor migratorio (CMM). Este ayuda a barrer las bacterias y los restos de comida hacia el colon. Cualquier condición que altere o ralentice este movimiento puede permitir que las bacterias se acumulen en el intestino delgado. Esto puede ser causado por:
    • Neuropatía diabética. El daño a los nervios por la diabetes puede afectar la motilidad intestinal.
    • Esclerodermia: Esta enfermedad autoinmune puede afectar los músculos del tracto digestivo, disminuyendo la motilidad.
    • Pseudo-obstrucción intestinal crónica. Una condición donde los intestinos no pueden contraerse normalmente.
    • Gastroparesia: Retraso en el vaciamiento del estómago, que puede afectar la motilidad del intestino delgado.
    • Hipotiroidismo. Niveles bajos de hormona tiroidea pueden ralentizar la motilidad intestinal.
    • Ciertos medicamentos. Como los narcóticos.
  • Obstrucciones. Obstrucciones físicas en el intestino delgado (por adherencias, tumores, estenosis) pueden causar estasis y sobrecrecimiento bacteriano.

2. Niveles bajos de ácido estomacal

  • El ácido estomacal ayuda a controlar la cantidad de bacterias que ingresan al intestino delgado desde el estómago. La reducción del ácido estomacal puede permitir que más bacterias sobrevivan y proliferen en el intestino delgado. Esto puede ocurrir debido a:
    • Uso prolongado de antiácidos e inhibidores de la bomba de protones (IBP).
    • Infección por Helicobacter pylori.
    • Cirugía gástrica, como el bypass gástrico.
    • Envejecimiento.

3. Anomalías anatómicas del intestino delgado:

  • Divertículos del intestino delgado. Se trata de bolsas pequeñas. Las cuales se forman en la pared del intestino delgado donde las bacterias pueden acumularse.
  • Fístulas. Conexiones anormales entre diferentes partes del intestino que pueden permitir el paso de bacterias del colon (rico en bacterias) al intestino delgado.
  • Asas ciegas. Formadas después de ciertas cirugías intestinales, donde una sección del intestino queda desconectada del flujo principal. Permitiendo el estancamiento y el crecimiento bacteriano.
  • Resección de la válvula ileocecal. Esta válvula normalmente evita el reflujo de bacterias del colon al intestino delgado. Su ausencia puede aumentar el riesgo de SIBO.

4. Enfermedades y condiciones asociadas:

  • Enfermedad celíaca.
  • Enfermedad de Crohn.
  • Síndrome del intestino irritable (SII).
  • Pancreatitis crónica.
  • Cirrosis hepática.
  • Insuficiencia renal crónica.

5. Medicamentos:

  • Antibióticos. Se usan para tratar infecciones bacterianas. El uso repetido de antibióticos puede alterar el equilibrio normal de la microbiota intestinal. Permite el crecimiento excesivo de ciertas bacterias en el intestino delgado.
  • Narcóticos. Pueden ralentizar la motilidad intestinal.