Los trastornos del lenguaje engloban diferentes aspectos de la vida de las personas. Entre las señales de que tu hijo tiene que ir al logopeda encontramos una falta de comprensión, producción e sonidos, gestualidad, socialización o un mal habla en el niño. Para poder identificar las posibles anomalías, lo más recomendable es conocer el proceso de adquisición normal del lenguaje y sus etapas.
Fijarse en las señales
Hoy en día es muy habitual quitar importancia a las señales que nos indican que nuestro hijo tiene que ir al logopeda. Es bastante común pensar qie ciertas situaciones se dan de forma puntual o que incluso pueden desaparecer con el tiempo. Sin embargo, a veces agravamos al problema al esperar demasiado. Por tanto, desde Clínica levante te aconsejamos acudir a tu logopeda en Rivas Vaciamadrid en cuanto aprecies los primeros signos de alarma.
Es muy importante pasar a la acción cuanto antes. Es necesario djear a un lado afirmaciones como ‘esperamos a que se le pase’, ‘todavía es pequeño’ o ‘ya hablará’ que se suelen escuchar de manera bastante habitual. Además, en la mayoría de los casos son completamente erróneas y la situación termina necesitando de un especialista.
Entre las señales de que tu hijo tiene que ir a un logopeda encontramos: no gesticular, no socializar, dificultad de comprensión, problemas de expresión o no hablar acorde al resto de niños de su edad.
Logopeda en Rivas: la importancia del diagnóstico
Es importante realizar un diagnóstico diferencial. Es necesario distinguir si se trada de trastornos en el habla, en la gramáica o el vocabulario o si nos encontramos con problemas en los procesos como la comprensión o la expresión.
Los niños comienzan su desarrollo desde recién nacidos. El lenguaje es un acto ecadenado. Esto quiere decir que si en los primeros aos se aprecia algún retraso, este hará que también se vea afectado su futuro aprendizaje.
De ahí precisamente la importancia de realizar un diagnóstico diferencial. Si pensamos que nuestro hijo tiene alguno de los problemas anteriores, es necesario ponerse cuanto antes en manos de un especialista. La improtancia de llevar a tu hijo al logopeda radica en evitar que un mal aprendizaje pueda repercutir en otros aspectos, como el desarrollo emocional o la socialización.
Por eso, si tu hijo tiene que ir al logopeda, llevarlo a tiempo es crucial para evitar tratornos más proofundos. A medida que los niños y niñas van creciendo, las dificultades a las que se enfrentan son mayores.
Señales por edad de que tu hijo tiene que ir al logopeda
Las señales que podemos encontrar por las que tu hijo tiene que acudir al logopeda pueden variar muchísimo dependiendo de la edad. Por eso, te contamos en qué consiste cada etapa, desde que son bebés hasta que alcanzan los seis años.
- Desde el nacimiento hasta los seis meses. Entre las primeras señales de alarma encontramos que un bebé no llore de forma habitual. Si tu bebé no emite balbuceos ni muestra una sonrisa social, es el momento de llevarlo al logopeda. Lo más normal es que el niño realice diferentes llantos cuando necesita comer o dormir.
- De los seis meses al año. Es importante prestar atención a la forma en que nuestro hijo o hija se expresa. Por ejemplo, si únicamente emite vocales, si no se involucra en juegos infantiles o si no responde a los intercambios verbales. En esta etapa, los niños empiezan a repetir vocalizaciones como ‘ma-má’ o ‘pa-pá’. Además, a esta edad suelen comprender cuando les dicen ‘adiós’ y ‘hola’.
A partir del año de edad
- Hasta el año y medio. En esta fase es importante fijarse si nuestro hijo no dice tres palabras. Observar si olvida algunas habilidades orales… Es normal que a partir del primer año suelan pronunciar algunas ódenes verbales y emitir algunas palabras con cierta finalidad. En esta etapa es normal que aprendan palabras nuevas.
- Hasta los dos años. Entre los 18 y los 24 meses es importante fijarse en la evolución del lenguaje de los niños. En esta etapa comienzan a manejar alrededor de 25 palabras y comienzan a desenvolverse en el mundo de la sintaxis. Además, reconocen su nombre. En esta etapa no es habitual que no digan nombres ni ‘mamá’.
- Entre los dos y tres años. En esta fase el problema se encuentra si tienen dificultad para constuir frases. Normalemnte saben formar preguntas con ¿Qué? Y comprenden órdenes verbales. Si a esta edad no construye frases de dos palabras, tiene un problema.
- Hasta los cuatro años es común que entiendan órdenes verbales así mismo debe utilizar frases con tres palabras y ampliar su vocabulario.
- Entre los cinco y los seis años, un problema es que no sepan contar una experiencia. A esta edad los niños suelen sentirse batsante seguros a la hora de expresarse y cuentan sus vivencias. Suelen entender cuándo se les habla. En esta edad, un signo de alarma es que el niño no nos entienda o sea incapaz de contar su historia.
- A los seis años, el niño cuenta con un correcto desarrollo del lenguaje y utiliza oraciones más complicadas. Si no comprende lo que se habla con él ni utiliza frases, así como si tampoco relata con total claridad su experiencia, es una señal de que tu hijo tiene que ir al logopeda.