Empieza el buen tiempo, los días son más largos, sale el sol… Empieza la operación bikini. Cada año, según se acerca el verano es muy común que se empiece a pensar en adelgazar a toda costa. Pero son muchos los peligros de la operación bikini desde el punto de vista nutricional. Por ello, nuestro equipo de nutrición de la clínica va a contarte cuáles son y cómo debes actuar.
Lo más saludable es comer bien durante todo el año. Llevar una dieta equilibrada en la que incluyas fruta, verdura, carne, cereales, legumbres, lácteos, etc. a lo largo de la semana. Además, cocinar al vapor, a l plancha o al horno y huir de los fritos y procesados es lo más sano y la mejor manera de no ingerir calorías de más.
Es importante porque es la manera de mantener un peso de manera saludable. La operación bikini mucha veces viene acompañada de déficit de nutrientes y castigos al cuerpo. Saltarse comidas, hacer ejercicio extremo, eliminar por completo los hidratos de carbono son dolo algunos ejemplos a los que se suele recurrir para llegar al verano con el “cuerpo perfecto”. Esto es muy peligroso para la salud y además puede crear un efecto rebote importante.
¿Pero qué hacer entonces? Pero si te has pasado y has cogido unos kilos y quieres eliminarlos, puedes iniciar un proceso de alimentación saludable para conseguirlo. Vamos a ver qué se puede hacer en estos casos para que afecte la salud.
¿Qué es la operación bikini?
La “operación bikini” es un término coloquial que se utiliza para describir un período de tiempo en el que las personas se esfuerzan por ponerse en forma y mejorar su apariencia física antes de la temporada de verano. Esta “operación” a menudo implica adoptar una dieta más saludable, hacer ejercicio regularmente y establecer metas de pérdida de peso o tonificación muscular.
La idea detrás de la operación bikini es prepararse físicamente para lucir un cuerpo más tonificado y en forma durante la temporada de verano. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el objetivo principal de este esfuerzo debería ser mejorar la salud y el bienestar en lugar de simplemente perseguir un ideal de belleza externa. Es fundamental adoptar hábitos saludables a largo plazo en lugar de recurrir a métodos rápidos pero insostenibles para alcanzar una apariencia determinada.
Consejos para evitar los peligros de la operación bikini
Para empezar, cambia el hábito en tus comidas, si no es saludable. Es preferible empezar a comer bien y perder peso de forma sostenible que de golpe. Empieza a incluir comida saludable y cocinada correctamente para evitar ingerir más calorías de las necesarias.
Procura hacer cuatro o cinco comidas al día en lugar de tres ara que el organismo no pare de “trabajar” durante todo el día. En estas comidas evita grasas saturadas, ultraprocesados, etc. y elige comidas nutritivas y de fácil digestión.
Practica deporte. La clave es el déficit calórico. es decir, que quemes más de lo que consumes. De esta manera, irás perdiendo peso de forma saludable y real, sin efectos rebotes.
Bebe agua. Al menos dos litros al día para que se eliminen los líquidos y toxinas que te sobran.
No te obsesiones. llevar un estilo de vida saludable es la mejor garantía de verte bien por dentro y por fuera. Ten paciencia y con este tipo de hábitos, lo conseguirás.