Muchas veces se oye aquello de:”no hay que mezclar el trabajo con la familia”. Sin embargo, hay muchas empresas familiares que siguen de generación en generación. Y en este momento de incertidumbre, también hay parejas que se plantean montar un negocio juntos. Algo que necesita mucha psicología de pareja.
Incluso, puede que muchos matrimonios o parejas estén viviendo las consecuencias de la crisis y estén teletrabajando desde su casa. Es decir,al final están trabajando juntos, por lo que también habría que aplicar la psicología de pareja. Puede que no necesitéis terapia con un psicólogo profesional, pero sí aplicar ciertas pautas para poder llevar una convivencia plena.
Problemas que surgen al trabajar juntos
Los principales problemas de las parejas que trabajan juntas en un mismo negocios son las largas jornadas laborales y, con ello, el poco tiempo libre, los ingresos inestables y las dificultades para coincidir en las vacaciones.
Como consecuencia de estas situaciones, las parejas de autónomos viven momento de estrés, irritación, enfados, tensión, malestar e, incluso, es común que surjan nuevas manías personales. En base a ello, las parejas de profesionales autónomos tienen más dificultades para relacionar su vida personal con la laboral, en relación a los trabajadores asalariados.
Sin embargo, es posible que una pareja de autónomo pueda complementarse en el ámbito laboral. Son las parejas las que ponen sus límites y normas para poder gestionar el tiempo en base a sus necesidades. Esta relación también tiene sus ventajas y son las que hay que poner en valor. Los dos son autónomos, por lo tanto entienden la situación de la otra persona, por lo que la comprensión debe ser básica. La clave está en la organización y en la empatía. Aprenden a vivir con sus circunstancias y giran tu vida en torno a ellas.
Consejos para aplicar psicología de pareja al trabajar juntos
Los conflictos son el pan de cada día de las parejas. Y más cuando las parejas trabajan juntas. Ya sea en un mismo negocios o, incluso, ahora teletrabajando juntos en casa pueden surgir nuevas. Sin embargo, nuestro equipo de psicólogos afirma que existen una serie de pautas eficaces para afrontar estos conflictos. Se tarta de aplicar un poco de psicología de pareja poniendo en práctica los siguientes consejos:
- Crear o destinar un espacio de convivencia para las relaciones íntimas entre la pareja.
- Aprender a cooperar, a tomar decisiones en conjunto y a velar por las necesidades y deseos de ambos.
- Organizar el tiempo para que cada parte de la pareja pueda destinar unos minutos al día para estar con el otro.
- Organizar planes, escapadas o viajes a corto plazo.
- Fijar vacaciones anules con bastante tiempo de antelación, para adelantar trabajo.
- Repartirse las tareas y responsabilidades del hogar o la convivencia.
Preguntas frecuentes sobre el trabajo en pareja
¿Qué pasa si una pareja trabaja en la misma empresa?
Cuando una pareja trabaja en la misma empresa, puede crear tanto oportunidades como desafíos en su relación y en el entorno laboral. Por un lado, compartir el lugar de trabajo puede fortalecer su vínculo al comprender mejor las presiones y triunfos laborales del otro, así como la coordinación de horarios. Sin embargo, también pueden surgir tensiones si los problemas del trabajo se llevan a casa o si surgen conflictos de intereses o favoritismos.
¿Cómo afecta el trabajo en las relaciones de pareja?
El impacto del trabajo en las relaciones de pareja puede ser significativo y variado. Por un lado, las demandas laborales causan estrés, cansancio y falta de tiempo para pasar juntos. Sin embargo, el trabajo también puede fortalecer la relación al ofrecer una fuente de apoyo mutuo. La clave radica en cómo la pareja gestiona el equilibrio entre el trabajo y la vida personal.
¿Por qué se prohíben las relaciones en el trabajo?
Las políticas que prohíben las relaciones en el trabajo generalmente se implementan para mitigar posibles conflictos de interés, favoritismo, acoso sexual o problemas de desempeño laboral. Estas restricciones buscan mantener un ambiente laboral profesional y evitar situaciones que puedan afectar negativamente la productividad, la moral del equipo o la reputación de la empresa.