La leucemia es la principal causa de muerte por cáncer infantil. Cada año se diagnostican más de 900 casos al año en los jóvenes españoles.
La leucemia es un cáncer que se produce en la sangre. Se trata del incremento en exceso de glóbulos blancos en la médula ósea. Este exceso impide que se produzcan otras células necesarias como las plaquetas y glóbulos rojos. De esta manera, los glóbulos blancos poco a poco invaden la sangre y los órganos.
En cambio, la anemia es una afección en la que la sangre no tiene suficientes glóbulos rojos sanos o hemoglobina. Esta última es una proteína en los glóbulos rojos que transporta oxígeno.
La anemia se caracteriza por causar fatiga, dificultad para respirar y otros síntomas.
Síntomas de la leucemia
Existen diferentes tipos de leucemia y en función de cada uno de ellos los síntomas pueden variar. No obstante, los síntomas más comunes son:
- Fiebre o escalofríos
- Cansancio.
- Debilidad.
- Anemia.
- Sensibilidad en los huesos.
- Infecciones.
- Pérdida de peso.
- Sangrado.
- Ganglios inflamados.
- Hematomas.
- Pequeñas manchas rojas en la piel.
- Sudar en exceso. No ligado al deporte o calor.
- En mujeres, menstruación en abundancia.
Causas
Se desconocen las causas de esta enfermedad. No obstante, tras diversas investigaciones se han detectado que hay varios factores que pueden incrementar el riesgo de padecerla.
- Exposición a sustancias radioactivas.
- Tabaquismo.
- Exposición a productos tóxicos como el benceno e incluso la quimioterapia como tratamiento para otros tipos de cánceres.
- Síndrome de Down.
- Síndrome mielodisplásico.
- Antecedentes de leucemia en familiares.
- Otras enfermedades congénitas.
Tipos de leucemia
Se puede clasificar según la rapidez de producción y en función de las células afectadas. Si atendemos a su rapidez se diferencian:
- Leucemias agudas: aquellas en las que el número de células crece rápido y sin control.
- Leucemias crónicas: al contrario que el caso anterior. Las células se producen lentamente.
En función de las células afectadas, existe la leucemia mieloide y linfoide.
- Mieloide: es el tipo más común en adultos. Empieza en las células mieloides, que se pueden desarrollar en glóbulos rojos, glóbulos blancos o en las plaquetas.
- Linfoide: es el tipo más común en niños y jóvenes. Comienza en las células linfoides y se produce por producción excesiva de linfocitos, que son un tipo de glóbulos blancos.
¿Cómo tratar la leucemia?
Tratar la leucemia es necesario. De no hacerlo, es una enfermedad mortal. Dependiendo de las características del paciente se aplicará un tratamiento u otro. Aunque en la mayoría de los casos suele ser necesaria la combinación de varios tratamientos.
- Quimioterapia: es el principal tratamiento de la leucemia y de la mayoría de cánceres. Consiste en la administración de medicamentos por vía oral o por vena para destruir las células de la leucemia.
- Radioterapia: consiste en la aplicación de en las células cancerosas. Su finalidad es impedir el crecimiento.
- Trasplante de Médula Ósea: es el tratamiento que más cura esta enfermedad. Consiste en reemplazar las células madre dañadas de la médula ósea de una persona por células sanas. Por ello, es de suma importancia que la sociedad se conciencie sobre la importancia de donar médula ósea. No todas las personas son compatibles con la persona que requiere el trasplante para su cura. Según algunos estudios solo 1 de cada 3000 personas que están inscritas como donantes son compatibles.
