Cuando se tiene un bebé, hay que realizarle diferentes revisiones durante los primeros meses de vida. Aunque el bebé es perfectamente, estas revisiones están estipuladas en el sistema de salud como “obligatorias”. Son las que se conocen como revisiones del niño sano.
Estas revisiones se realizan en el centro de salud que corresponda y sirven para controlar que el bebé está evolucionando con normalidad. En estas revisiones del niño sano se valora la salud del peque, pero también su desarrollo, habilidades motoras y sociales, etc. También son consultas en las que se informa sobre la alimentación y consejos de crianza, además de administrarle las vacunas que le correspondan.
Cuáles son las revisiones del niño sano
Aunque no son totalmente universales, las revisiones suelen ser muy similares. Es cierto que varían entre comunidades e, incluso, a veces entre distritos, pero lo cierto es que las diferencias son mínimas. Por ejemplo, si en un sitio se hace una revisión a los 9 meses, a lo mejor en otro es a los 10. Vamos a ver cuáles son las más comunes.
- Recién nacido. Esta revisión es universal en todos los hospitales. Es necesario que se valore al bebé antes de darle de alta. Se realiza en el mismo hospital en el que ha nacido.
- 48 horas. Lo habitual es que el pediatra que haya dado el alta en el hospital informe a los padres de que deben pedir cita ene l centro de salud que les corresponda para una primera revisión con el o la nueva pediatra de su bebé. Es importante para que se valore si recupera el peso del nacimiento, cómo se alimenta, si necesita suplemento, etc.
- 15 días. Esta revisión se realiza en el mismo cetro de salud y con el mismo profesional y se valora esta evolución del bebé, su desarrollo, peso, alimentación, estado general, etc.
- Primer mes. Esta revisión se realiza una exploración física, en la que se valoran los sentidos, la coloración de la piel, las mucosas, el estado de las fontanelas y el estado neurológico del bebé.
- Dos meses. Esta es la primera revisión en la que se incluye una vacuna. Es importante porque empiezan a inmunizarse de enfermedades. También se sigue controlando el desarrollo del bebé.
- 4 meses. Se continúa con el calendario de vacunación y se administra la siguiente. La realiza un profesional de enfermería.
- 5 meses. Es la siguiente revisi´ón pediátrica para valorar cómo se ha desarrollado el bebé, su peso, sus estímulos y habilidades.
- 6 meses. Revisión para introducir la alimentación complementaria. Se informa sobre ´como se puede ir realizando esta introducción y cuáles son los alimentos recomendados, cómo ofrecerlo, etc.
- 11 meses. Además de una nueva vacuna, se explora al niño y se revisa cómo está creciendo, si responde a los estímulos propios de su edad, cómo come, cómo es el sueño, etc.
- 12 meses. Se vuelve a vacunar al bebé y se realiza una revisión completa de su alimentación, peso y talla, perímetro cefálico, habilidades motoras y sociales, lenguaje, etc. Además se informa sobre el resto de alimentos que se pueden seguir ofreciendo al peque, así como cambios que se deben empezar desde este momento.
Además de estas revisiones, el bebé debe ir al pediatra siempre que se tengan sospechas de cualquier alteración, fiebres altas, sarpullidos, vómitos, etc.
También es importante destacar que hay un calendario de vacunación subvencionado y otro opcional. Este también varía entre comunidades. En algunos se incluyen unas y en otros no. Cada uno tiene el suyo y se informan en el centro de salud. Los progenitores deciden qué vacunas ponen a su hijo y cuáles no, valorando todas las circunstancias.
