El cólera se trata de una enfermedad infecciosa aguda del sistema gastrointestinal causada por la bacteria Vibrio cholerae. Se caracteriza por una rápida aparición de diarrea acuosa que conduce a la deshidratación severa. Aunque cada vez es menos común, sigue siendo una amenaza en áreas con acceso limitado a servicios de saneamiento e higiene.
¿Qué síntomas tiene el cólera?
Los síntomas típicos se manifiestan de manera repentina y varían desde indicios leves hasta graves. Los signos más comunes del cólera son:
- Diarrea acuosa intensa. Es el síntoma más característico del cólera. La persona afectada experimenta evacuaciones intestinales frecuentes y abundantes.
- Vómitos. Suele acompañar a la diarrea, lo que contribuye a la pérdida adicional de líquidos y electrolitos.
- Calambres abdominales. Algunas personas afectadas por el cólera experimentan fuertes calambres abdominales, que a menudo se asocian con la diarrea.
- Deshidratación. La pérdida masiva de líquidos a través de la diarrea y los vómitos lleva rápidamente a la deshidratación. Los signos de deshidratación incluyen sed intensa, sequedad en la boca y la garganta y disminución de la producción de orina, entre otros.
¿Por qué se causa el cólera?
El cólera surge por la bacteria Vibrio cholerae, específicamente por ciertos serogrupos de la bacteria que poseen la capacidad de producir una toxina llamada toxina colérica. La transmisión de la enfermedad generalmente ocurre por las siguientes razones:
- Contaminación del agua. La contaminación del suministro de agua es una vía común de transmisión de esta enfermedad. En áreas donde el saneamiento y las infraestructuras son deficientes, el riesgo de propagación del cólera es más alto.
- Alimentos contaminados. La bacteria también se transmite a través de alimentos contaminados, especialmente mariscos y productos agrícolas regados con agua contaminada. El consumo de alimentos crudos o insuficientemente cocidos provenientes de áreas afectadas aumenta el riesgo de infección.
- Falta de saneamiento e higiene. En áreas donde no hay acceso adecuado a instalaciones de saneamiento y donde las prácticas de higiene son deficientes, se propaga rápidamente.
- Hacinamiento y condiciones precarias. La falta de acceso a servicios básicos de salud y la limitada capacidad para contener la enfermedad contribuyen a la propagación rápida en zonas urbanas con infraestructuras precarias.
Tratamientos para solucionar esta enfermedad
Para tratar el cólera se emplean tratamientos de rehidratación para contrarrestar la pérdida de líquidos y electrolitos por la diarrea y los vómitos, tales cómo:
- Rehidratación oral. Este es el tratamiento más común para el cólera, especialmente en casos leves o moderados. Se administran soluciones de rehidratación oral que contienen una combinación de sales y glucosa para reponer los líquidos y electrolitos perdidos.
- Rehidratación intravenosa. En casos más graves de cólera, donde la pérdida de líquidos es significativa, la rehidratación intravenosa es necesaria. Esto implica la administración de líquidos directamente en la vena para restablecer rápidamente los niveles de líquidos y electrolitos en el cuerpo.
- Antibióticos. Los antibióticos son recetados para reducir la duración y la gravedad de la enfermedad, así como para limitar la propagación de la bacteria. Los tipos comunes de antibióticos utilizados incluyen la doxiciclina y la azitromicina.
- Zinc. La administración de suplementos de zinc también ayuda a reducir la gravedad y la duración de la enfermedad, especialmente en niños.
Aún así, es conveniente acudir a profesionales para que te indique los tratamientos a tomar. Esto servirá para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento personalizado para prevenir el cólera.