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otitis

Otitis: prevención, tratamiento, causas y síntomas más frecuentes

La otitis a la inflamación del oído provocada por una infección, que puede afectar a personas de cualquier edad y sexo. Existen diferentes tipos, aunque la más frecuente es la conocida como otitis media.

La otitis media se produce cuando hay líquido en la cavidad media del oído que se acumula y produce la infección. La acumulación del líquido tiene lugar como consecuencia de una obstrucción que no permite el drenaje del líquido por las trompas de Eustaquio.

Se trata de una infección que se produce con más asiduidad en verano, ya que el agua y la humedad e incluso la contaminación de las aguas, ya sea de piscina, playa o ríos, hacen que la probabilidad de infección aumente considerablemente.

Los síntomas habituales que muestran la afección es dolor en el oído e incluso fiebre, así como supuración. También puede provocar, aunque no es lo común, vértigos.

Causas generales de la otitis

Las causas por las que se provoca la otitis son muy variadas. Puede influir la edad. La otitis es más frecuente en niños, principalmente en los primeros meses de vida, aunque es extensible hasta los 12. No obstante, cualquier persona de cualquier edad puede sufrir esta patología.

También puede producirse por otra enfermedad. Es decir, como consecuencia de un resfriado, gripe o alergia, la congestión e hinchazón de zonas como garganta y trompas de Eustaquio pueden dar lugar a otitis.

A ello, se le suma la temperatura y época del año. En verano se producen la otitis por la excesiva humedad al estar durante bastante tiempo en el agua. Pero en invierno también es frecuente debido al cambio ambiental y a la mayor frecuencia de resfriados y gripes.

Cómo prevenir la otitis

La otitis puede prevenirse teniendo en cuenta una serie de consejos y cuidados, fáciles de seguir y muy eficaces.

Secar el oído correctamente es la forma de prevenir más importante, sobre todo la parte externa. Para ello es recomendable no estar bajo el agua demasiado tiempo, principalmente si se trata de aguas contaminadas, evitando así la entrada de agua. Para limpiar y secar el oído no utilices bastoncillos y si notas que tienes agua, inclina la cabeza y da pequeños saltos hasta expulsarlo.

Si, aun así, continúas teniendo agua en el oído puedes aplicar alcohol boricado, producto que puedes adquirir en la farmacia sin receta médica. Si se producen tapones debes acudir al otorrino para realizar una limpieza.

Tratamiento

La recomendación más habitual y sencilla es no mojar el oído y tomar analgésicos como puede ser el paracetamol o ibuprofeno, que sirven para aliviar el dolor.

No obstante, el tratamiento como tal más habitual es con la ingesta de antibióticos con prescripción médica. Su duración dependerá de cada caso, desde una semana hasta quince días, aunque ya en los primeros días ya se notan mejoras.

Existen casos como en la otitis crónica que los síntomas son mayores, pudiendo llegar a perder audición. En esos casos el tratamiento es específico, tiene que ser consultado con un otorrinolaringólogo, ya que en ocasiones es necesaria una intervención quirúrgica.