Las muelas del juicio son los últimos molares que aparecen en la boca. Se conocen como el tercer molar, aunque técnicamente se llaman cordales. Se sitúan en el fondo de la boca y generalmente aparecen entre los 12 y 25 años. En total existen cuatro muelas del juicio, dos en la parte superior y dos en la parte inferior.
Las muelas del juicio son importantes y hay que controlarlas porque con frecuencia suponen un problema para la salud bucodental. Por ello, es recomendable acudir al dentista. Aparecen cuando no existe un espacio suficiente para su crecimiento lo que suele provocar diversos problemas como infecciones o dolor.
Cuando no se cuenta con el espacio suficiente pueden darse los siguientes casos:
- La muela crece hacia el segundo molar.
- Crezca en dirección contraria al segundo molar.
- La muela crezca en ángulo recto contra el otro diente.
- Crezca de forma correcta, es decir, recto hacia arriba, pero se quede atrapada en el maxilar.
Síntomas de la aparición muelas del juicio
Dependiendo de cómo crezca la muela según los casos explicados anteriormente se puede producir los siguientes síntomas:
- Dolor
- Infección
- Quistes
- Tumores
- Daño a los dientes adyacentes
- Enfermedad de las encías
- Caries (si no es posible o deseable restaurar la muela)
Es el dentista quien, examinando la situación de cada paciente, determinará el mejor tratamiento. Para ello, se suele realizar una radiografía. Generalmente se suele apostar por la extracción. No obstante, puede darse el caso de que no sea la mejor opción por la salud bucodental del paciente.
Además, según van apareciendo de forma progresiva las muelas del juicio se pueden ir produciendo una serie de síntomas según la forma de aparición: hacia la otra muela, hacia la encía, etc.
- Cuando la muela no tiene espacio para salir se pueden dañar los dientes de alrededor.
- Si la muela del juicio no termina de salir al completo las bacterias pueden afectar a las encías y provocar infecciones.
- Las muelas del juicio que no están en la posición correcta pueden hacer que la comida quede atrapada. Como consecuencia las bacterias que causan caries pueden crecer y provocar mayores complicaciones.
- Cuando una muela del juicio está incrustada puede formar un quiste. Lo que provoca daños en las raíces de los dientes. Puede tener repercusiones preocupantes como la destrucción del hueso que sujeta los dientes.
Complicaciones aparición muelas del juicio
Es importante que las personas tengan en cuenta los problemas que pueden causar las muelas del juicio. Las complicaciones más típicas que suele suceder son:
- Daños en otros dientes. Cuando la muela de juicio hace presión contra la muela de al lado. En este caso puede dañar dicha muela, provocar el movimiento del resto de dientes e incluso generar una infección.
- Quistes. Las muelas de juicio se forman dentro de la mandíbula. El saco puede llenarse de líquido y así formar un quiste que puede tener consecuencias negativas como daños en la mandíbula, los dientes y los nervios.
- Caries. Las muelas de juicio que no salen al completo tienen en riesgo de tener caries. Esto puede suceder porque las muelas del juicio suponen una mayor dificultad para ser limpiadas correctamente debido a su ubicación. Los alimentos se quedan entre la encía y la muela y es difícil acceder a ellos.
- Enfermedad de las encías. En línea con el punto anterior, la dificultad de acceder a la zona para su limpieza puede suponer inflamación en las encías, la llamada pericoronaritis.
