La neumonía es una infección de un virus o bacteria que inflama los pulmones. Provoca que los alvéolos pulmonares se llenen de líquido o pus.
Existen dos grandes tipos de neumonía: viral, es decir aquella producida por virus; y la bacteriana, como su nombre indica es causada por bacterias.
Los síntomas dependen de lo avanzada que esté la infección y de aspectos de la persona que la padece como la edad o el estado de salud. Algunos de los síntomas pueden ser:
- Tos con flema.
- Escalofríos.
- Dificultad para respirar.
- Fatiga.
- Fiebre.
- Náuseas y vómitos.
- Diarrea.
- Desorientación.
- Dolor en el pecho.
La forma más común de padecer neumonía es debido a la aspiración de microorganismos. Estos suelen llegar al pulmón y producir infección por diferentes motivos. Los más comunes son el consumo de tabaco, alcohol, mala alimentación o enfermedades crónicas.
¿Cómo se diagnostica?
Normalmente el diagnóstico de la neumonía se realiza tras el conocimiento de los síntomas y de la auscultación. Sin embargo, aunque el médico sospeche de una neumonía la prueba que confirma la patología es una radiografía de tórax.
Si se contempla que es un caso grave de neumonía puede diagnosticarse con un TAC de tórax. Si se busca conocer el microorganismo causante se realiza un cultivo de esputo, análisis de sangre y de orina o broncoscopia, entre otras.
Tratamiento de la neumonía
El tratamiento para la neumonía es la ingesta de fármacos antibióticos cuando la neumonía no requiere de ingreso hospitalario. Para aquellos casos en los que no hay gravedad por no tener factores de riesgo.
Para los casos más graves, que sí requiere de ingreso hospitalario el tratamiento también es mediante antibiótico, pero esta vez es intravenoso y en ocasiones se necesita la utilización de otros medicamentos.
En cuanto al tipo de antibiótico, es el médico quien se encarga de decidir cuál, en base a la gravedad, el microorganismo causante, las características, los síntomas, etc.
¿Se puede prevenir la neumonía?
Es difícil prevenir la neumonía, pero es cierto que llevando a cabo los siguientes consejos se reducen las posibilidades:
- No fumar.
- No beber alcohol.
- Vacunarse de la gripe.
- Vacuna contra el neumococo.
- Tener un estilo de vida saludable.
- Buena hidratación.
- Evitar la fatiga y coger frío.
- Mantener una buena higiene de manos. Uso de desinfectante o lavado con geles.
¿La neumonía es contagiosa?
La neumonía en sí no es contagiosa, pero sí lo es el virus o las bacterias que la provocan. Es decir, puede contagiarse la bacteria pero que la otra persona no sufra neumonía. Las bacterias o virus se transmiten al toser o respirar.
¿Cuánto dura el tratamiento?
La duración del tratamiento depende de la gravedad, del tipo de antibiótico, etc. No obstante, puede durar entre una semana y quince días los casos más leves, o más de un mes para los casos más graves. En cualquier caso, será el médico quien decida la duración del tratamiento, también en función de la mejora diaria de la patología.
